Artículo original de: El Debate
Por Santiago Jáuregui
l declive demográfico de Occidente tiene su origen básicamente en las dos corrientes ideológicas que han marcado el devenir de nuestras sociedades desde la década de 1960, el marxismo y el liberalismo, las cuales se unen bajo una bandera común, la del aborto convertido en derecho fundamental, los llamados derechos LGTBI, los también denominados derechos reproductivos, la ideología de género y el feminismo radical. Estas corrientes han penetrado e invadido la sociedad occidental actual, caracterizándose por haber moldeado la conciencia moral de buena parte de sus habitantes, quienes, desasidos de la necesaria formación humana, moral y cristiana y por tanto de criterios sólidos de actuación en un mundo cada vez más complejo debido a la hegemonía de grandes grupos mediáticos, tecnológicos y financieros, se han entregado de lleno a postulados diametralmente opuestos a la dignidad de la persona y a la defensa de la vida, del matrimonio como unión indisoluble entre hombre y mujer y del fomento de la familia abierta a la vida y a la educación de los hijos en sintonía con la ley natural.