Artículo original de El Debate
Por Mariano Gomá
Dejemos de escondernos, de quejarnos y criticar todo lo que nos pasa y nos puede pasar, pues recrearse en el horror no ayuda ante ya no adversarios, sino enemigos peligrosos que con la rabia que destilan van a devorar nuestra alma, someternos y enjaularnos en la cárcel de la incultura y la pobreza mientras danzan a nuestro alrededor preparando el litúrgico aniquilamiento de nuestra voluntad, valores y libertades individuales.